Durante la pandemia, la biotecnología se destacó como una poderosa herramienta para desarrollar vacunas que permitieron volver a la normalidad en el día a día de los costarricenses.
Sin embargo, sus aplicaciones van mucho más allá, abarcando desde el aprovechamiento de residuos hasta la creación de nuevos medicamentos y la protección de cultivos, lo que aporta en diferentes áreas de la vida cotidiana, incluyendo la economía.
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Costa Rica es un territorio fértil para esta rama de la ciencia, donde se llevan a cabo diversas líneas de investigación tanto en el ámbito académico como en el área industrial.
Para visibilizar los avances de este sector científico en el país, en junio se realizó un encuentro donde se reunieron empresarios, científicos, académicos y estudiantes, fomentando el intercambio y la retroalimentación para impulsar aún más el desarrollo de esta disciplina científica.
“Tenemos interés en que el área se desarrolle para que podamos intercambiar conocimientos, crear nuevas ideas y generar nuevos proyectos en el ámbito de la bioeconomía”, mencionó Federico Torres Carballo, director de Innovación del Ministerio de Ciencia y Tecnología.
La biotecnología no solo promete soluciones a problemas ambientales y de salud, sino que también puede generar oportunidades económicas al país. Un claro ejemplo puede ser la reutilización de residuos agroindustriales, lo cual podría contribuir al establecimiento de empresas tecnológicas rurales y al desarrollo económico local.
“Los desechos agroindustriales están generados en zonas rurales, entonces uno podría estar visualizando a futuro la instalación de empresas de base tecnológica en estas zonas donde el impacto sería mayor, porque los índices de desarrollo son menores”, expresó Ana Francis Carballo, investigadora de la Escuela de Química.
Por otra parte, en el campo educativo, se está fomentando la formación de científicos con habilidades emprendedoras, lo que impulsa la aparición de nuevas empresas tecnológicas.
El talento de Costa Rica es altamente apreciado, y varias empresas extranjeras del sector tecnológico han mostrado interés en el país debido al nivel de capacitación de sus profesionales.
El desarrollo de la economía circular y la implementación de soluciones en diferentes áreas de la biotecnología representan un reto y una oportunidad.
Con una amplia gama de aplicaciones e investigaciones, Costa Rica tiene un gran potencial para destacar en este campo y convertirse en un referente mundial en conocimiento e ideas creativas.
“Tenemos profesionales altamente capacitados que pueden competir con cualquier país del mundo, en conocimiento y en ideas creativas”, dijo Christian Marín Muller, virólogo y fundador de Speratum.
Ventajas que podría aportar al país el desarrollo de la biotecnología
1. Puede ayudar al crecimiento del sector agropecuario.
2. Colabora en la disminución de la contaminación ambiental.
3. Puede aportar al crecimiento industrial en las áreas rurales, generando más empleo.
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