Meta compartió su modelo Llama con agencias del gobierno de EE. UU.,en un esfuerzo por fortalecer la seguridad nacional y competir con China en la carrera por el liderazgo en Inteligencia Artificial.
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Meta decidió compartir sus modelos de Inteligencia Artificial (IA) conocidos como Llama a agencias gubernamentales y contratistas de defensa en Estados Unidos,en una estrategia que apunta a fortalecer la competitividad del país frente a China en la carrera por el liderazgo en IA.
La colaboración incluye asociaciones con empresas como Amazon Web Services,Oracle,Microsoft,Palantir y Lockheed Martin,que aplicarán estos modelos en áreas cruciales para la seguridad nacional. Según Meta,esta decisión no sólo beneficiará a EE. UU.,sino que también ayudará a establecer un estándar global de IA basado en principios democráticos de transparencia y responsabilidad.
Meta sostiene que esta apertura de su modelo Llama tiene el potencial de formar un ecosistema global de IA de código abierto,similar a lo que sucedió en el pasado con tecnologías como Linux y Android.
“Creemos que es de interés tanto para Estados Unidos como para el mundo democrático en general que los modelos de código abierto estadounidenses superen y triunfen sobre los modelos de China y otros países”,afirmó Nick Clegg,presidente de Asuntos Globales de Meta. Para la compañía,el liderazgo estadounidense es fundamental para establecer un entorno de IA seguro y ético que apoye la paz y la seguridad mundial.
Además,Meta amplió el acceso a Llama a gobiernos aliados como el Reino Unido,Canadá,Australia y Nueva Zelanda,consolidando una coalición internacional de IA de código abierto. Este enfoque contrasta con el modelo chino,donde la tecnología es estrechamente controlada por el Estado.
La competencia en IA entre Estados Unidos y China no se limita a la tecnología en sí misma,sino que también incluye la influencia geopolítica que ambos países buscan ejercer a través de ella. Mientras EE. UU. impulsa un estándar de código abierto que favorece la transparencia,China está desarrollando sus propios modelos y buscando socios en economías emergentes, intentando posicionar su tecnología en regiones estratégicas.
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Esta colaboración entre Meta y el gobierno de EE. UU. también señala el rol estratégico que desempeñan las grandes empresas tecnológicas en la carrera geopolítica por dominar la IA.
Con la Inteligencia Artificial y la ciberseguridad como áreas de creciente importancia para asuntos de seguridad nacional,el gobierno estadounidense ha comenzado a depender cada vez más de gigantes tecnológicos como Meta,Amazon y Microsoft,tanto por sus recursos como por sus capacidades avanzadas para desarrollar soluciones a gran escala.
Estas compañías no sólo aportan tecnología,sino que también influyen en el diseño de políticas,de estándares de IA y de la infraestructura crítica.
Además,con la apertura de Llama,Meta reafirma su interés por la competitividad tecnológica de EE.UU.,pero también resalta cómo las empresas tecnológicas están posicionándose como piezas clave en la geopolítica moderna,impulsando el desarrollo de un ecosistema de IA que podría moldear la infraestructura global para la próxima generación de tecnología digital.
Este papel de las tecnológicas plantea desafíos respecto a los límites de la influencia corporativa en asuntos de seguridad nacional. A medida que el sector público y privado estrechan lazos para construir el futuro ecosistema de IA,surge un debate sobre la necesidad de regulación para asegurar que esta influencia corporativa esté alineada con el interés público y no se concentre en manos de unos pocos actores que puedan priorizar sus propios intereses comerciales.
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